El éxito de Dylan, Beatles y Rolling se debe, en gran medida, a la ruta allanada en los años cincuenta por Elvis Presley en la ampliación del gusto y hábitos musicales. Contaron, además, con tres aliados fundamentales: la popularización de la televisión, las estaciones de radio musicales y la difusión masiva del tocadiscos ya con discos en estéreo desde finales de los años cincuenta. Así es que la cultura y el arte pop en sus diferentes expresiones afloraron con fuerza y esas nuevas músicas se acercaron a todas las personas.
Con las conmemoraciones de estos grandes artistas te deseamos un año lleno de música y ritmo:
El mito de The Beatles
Suena la armónica… “Love, love me you / You Know I love you / I’ll always be True / So please… / Love me…”. Es la inconfundible canción de los Beatles Love Me Do que, además, fue el primer sencillo que la banda de Liverpool lanzó el 5 de octubre de 1962. Compuesta por Paul McCartney y John Lennon, la canción formaría parte de su primer álbum Please, Please me (1963) y, casi desde entonces, el mundo vivió una revolución musical muy popular. Duraron solo hasta 1970, más que suficiente para ser parte de la historia cultural.
Sus orígenes se remontan a 1956 cuando Lennon, con 16 años, creó la banda de The Quarry Men del más puro estilo skiffle, que se servía de instrumentos caseros y baratos que permitía a los jóvenes dar rienda suelta a sus pulsiones musicales más innovadoras. Un año después Lennon tocaba con su banda en una fiesta donde conoció a Paul McCartney que se unió como cantante y guitarrista. En 1958 invitó a su amigo George Harrison a unirse a la banda. Los tres lograron que The Quarry Men abandonara el skiffle en favor del rock and roll, otros sonidos pop y temas propios. En octubre de 1959 los tres, bajo el nombre de Johnny and the Moondogs se presentaron en Liverpool en unas audiciones en busca de un cupo para el programa de televisión de nuevos talentos dirigido por Carroll Lewis. No llegaron a la final, pero conocieron a Ringo Starr que actuó como baterista de Rory Storm and the Hurricanes. El febrero de 1961 empezaron a tocar en el club The Cavern, en el centro de Liverpool. En noviembre de ese año los escuchó Brian Epstein que se convertiría en su primer representante y figura capital para el lanzamiento de la banda. Idas y venidas, vueltas y revueltas llevaron a que los cuatro, Lennon, MacCartney, Harrison y Starr lanzaran en 1962 Please, Please me y se desatara la locura. Sesenta años después la beatlemanía está servida, aunque siempre lo ha estado.
El poeta Bob Dylan
Aunque los Beatles tienen su prehistoria con otro nombre, el primero de los tres grandes artistas musicales en aparecer en escena como serían conocidos fue Bob Dylan (1941). En 1961 el cantautor estadounidense empezó a tocar en algunos clubes hasta que lo vio y fichó, para Columbia Records, John H. Hammond que tenía el prestigio de haber trabajado, hasta entonces, con artistas como Billie Holiday, Aretha Franklin y Big Joe Turner. En marzo de 1962, cuando todavía no había cumplido 21 años, Dylan publicó su primer álbum de estudio que ya anunciaba toda una declaración de intenciones en el título: Bob Dylan.
El folk, sus inquietudes sociales y su estilo ya estaban ahí, en canciones tradicionales y clásicas y ritmos de blues y gospel y, sobre todo, dos temas propios: Song to Woody y Talkin’ New York. Fue un comienzo discreto. Pero ese verano fue definitivo al contratar a Albert Grossman como su representante. Ese mismo diciembre de 1962, Dylan viajó a Londres y participó en la obra de la BBC The Madhouse on Castle Street, en la que interpretó su famoso Blowin’ in the Wind. Pronto se convirtió en uno de los grandes y más influyentes cantautores del mundo. Incluso recibió el Nobel de Literatura en 2016 “Por haber creado nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición de la canción americana”, según la Academia Sueca.
La revolución de The Rolling Stones
Mientras en la primavera de 1962 Bob Dylan recibía críticas de todo tipo por su primer álbum y los Beatles se encaminaban hacia su éxito, Reino Unido vio cómo ese abril nacía la banda de rock que cambiaría el género: The Rolling Stones. Tres meses después, el 12 de julio, se presentaron ante el mundo con su primer concierto Mick Jagger, Keith Richards, Brian Jones, Ian Stewart, Dick Taylor y Tony Chapman, aunque luego algunos integrantes cambiarían. Esa actuación fue un golpe de suerte, se debió a la cancelación de Blues Incorporated en el Club Marquee de Londres.
Todo había empezado un año antes cuando Richards y Jagger, que habían estudiado de niños en la misma escuela, se reencontraron. Ya adolescentes, el primero asistía al Sidcuo Art College y el segundo intentaba estudiar económicas mientras cantaba con la Little Boy Blue and the Blue Boys que tenía como bajista a Dick Taylor, amigo de Richards. Así empezaron actuaciones en bares y giras, pronto lo fichó Giorgio Gomelsky para actuar cada domingo en el Crawdaddy Club de Richmond. Hasta que los vio el publicista de The Beatles, Andrew Loog Oldham, que vio en ellos un gran talento musical y una nueva puesta en escena para promocionarlos como rebeldes e inconformes. Por recomendación de George Harrison, de los Beatles, en mayo de 1963 los contrató Dick Rowe para Decca Records. El 7 de junio lanzaron su primer tema: Come On, de Chuck Berry. Sesenta años después, muchos éxitos y escándalos, los Rolling siguen incombustibles en sus giras por el planeta.
2022 tiene así una banda sonora inmejorable que cambió la música para siempre y potenció la cultura popular con los Beatles, Dylan y los Rolling.