Manuel Vilas: “La comedia es un gran espacio de libertad y no te hace esclavo de las normas”
Manuel Vilas ha escrito en El mejor libro del mundo (Destino) su obra más personal y franca desde Ordesa (Alfaguara). Y su obra con más sentido del humor al escenificar la comedia que habita en la vida de cada persona, en este caso, de los escritores, a partir de las vivencias y vulnerabilidades de un autor llamado como él, que cuenta cosas del propio Vilas pero que, cuando se pone a escribir, es como si lo poseyera otro. El poeta y narrador aragonés desveló parte de mundo de su creación literaria en el Club de Lectura de Ámbito Cultural, de El Corte Inglés en la sala Callao, de Madrid.
Vilas (Barbastro, Huesca, 1962) gran contador oral y con un sentido del humor contagioso conversó con Rafael Caunedo, coordinador de este ciclo, del que surge este sincero, conmovedor y filosófico Diccionario Manuel Vilas:
Yo soy el otro
No sé si el personaje de la novela soy yo o no. Porque cuando me pongo a escribir delante de la pantalla viene otro a escribir mi vida. Lo que cuento sí me ha pasado pero ese otro le da otro aliento, una energía diferente, lo interpreta todo de manera lateral y alternativa, le da empuje a lo que me ha sucedido. Hay una especie de divergencia entre el ciudadano y el narrador.
El arte de la amistad con los lectores
No hay ni una gota de vanidad en este libro. Lo que cuento está al servicio del lector, por si ven que a ellos también les han pasado esas cosas. Es un arte de amistad. La literatura es un pacto de amistad entre un señor que escribe y los lectores. ¿Qué hacen los amigos? Se cuentan las cosas que les han pasado. Eso es un poco lo que hago en este libro.
Miedos del escritor
Como escritor, uno siempre tiene miedo de llegar a un sitio y que no haya nadie. Eso me ha pasado. Si quieres deprimir a un escritor, invítalo a un sitio y que no haya nadie, lo matas.
Vilas vs Rivas
Me hace mucha gracias las veces que me confunden con Manuel Rivas. Una vez me dijeron que querían llevar al teatro Ella, maldita alma, y les dije que esa obra es de Manuel Rivas. Otro día me entregaron un premio y el presentador dijo: ¡Ahora que salga Manuel Rivas!
Humor
Eso de que me confundan con Rivas es divertido. A mí esas cosas que tienen dentro la comedia, porque la comedia para mí es vida, que quitan solemnidad a las cosas, me parecen bien, aunque sea yo quien las padezca. Eso hace que la gente se relaje y vea la vida como algo más cómico, menos trágica.
La comedia humana
Nunca pensé que mi libro más famoso, Ordesa, sobre la muerte de mis padres y sus efectos en mí, tuviera humor. Al principio unos amigos que lo leyeron me señalaron varios pasajes. Me quedé de piedra. Pero comprobé que eran divertidos. En Aragón hay una idiosincrasia que lleva el humor de serie en acontecimientos dolorosos o tristes, y aún en esos momentos somos capaces de acudir al humor o de que el humor nos auxilie y se aparezca como solución a un enigma.
Luis Buñuel
Soy una especie de hijo de Luis Buñuel. Cuando presento mis libros en otros países y los periodistas me entrevistan para ponerlos en contexto les digo que soy de la misma región que Buñuel y entienden todo. Piensan este asilvestrado que viene del sur de España.
La comedia te libera
Es la vida como una comedia y la comedia es un gran espacio de libertad y no te hace esclavo de las normas. En la comedia respiras, rompes los códigos, eres muy libre, no sigues las leyes. La comedia se salta la autoridad y es la parte del humor que más me interesa.
La vulnerabilidad
El editor me dice tal día tu libro estará a la venta. Y ese día iba a tres o cuatro librerías, y si no estaba me moría de miedo; veía al librero como el maligno cuyo trabajo era que mi libro no estuviera a la venta. Creía que era una disfuncionalidad mía como escritor. Incluso, si veía mi libro medio escondido, lo ponía encima del premio Planeta. ¡Es una cantada de narices! Pero lo hace el 95% de los escritores.
Contradicciones
Una de las características más profundas del ser humano es que es contradictorio, y no pasa nada. En el libro hay una especie de elogio de la contradicción de uno mismo. Si hay un perjudicado es uno mismo, no le haces mal a nadie. Otra cosa es mentir. Todos estamos llenos de contradicciones, es consustancial al ser humano. Otra cosa es utilizar la mentira o el engaño y perjudicar a los demás.
Consejos de mi madre
Mi madre me dio dos consejos muy elementales e importantes: “Hijo mío, no seas un muerto de hambre” y “Por favor, no seas el último mono”.
Cultura
Es imposible que la cultura se dé en un país sin prosperidad económica. El teatro, la música, la danza, el cine, necesitan de esa prosperidad económica para crearse y avanzar. La modernidad política también necesita de esa prosperidad.
Somos tiempo
Estamos en un presente, pero dentro de 50 años no pasearemos por la Gran Vía de Madrid. La realidad humana es que somos tiempo y nos vamos a tener que marchar y vendrán otros. Es una realidad y tampoco es tan trágica porque hay belleza. Es algo que me obsesiona. El paso del tiempo, en realidad, lo que tiene delante es el misterio de la muerte. Ningún ser humano sabe dominar ni enfrentar de manera serena esto. Es muy difícil pensar en tu extinción. De ahí nacen las miles de religiones.

