Todos buscan a Israel Elejalde. E Israel Elejalde se deja ver, oír, escuchar y sentir en el teatro, la televisión, el cine y la literatura. Incluso quienes no lo buscan se topan con él y disfrutan de su talento sin saber que es él, su voz, la que les narra las historias de algunas novelas en audiolibros. Es un hombre alto, fibroso, de pelo negro y de bigote y barba cortas que no logran ocultar su rostro de busto griego. Presencia y voz; palabra y movimiento; sensibilidad y pensamiento de un actor y lector en busca de retos y exploraciones. Pero, sobre todo, de un ciudadano atento al pulso de la actualidad consciente de que la palabra hablada y escrita es voz viva.
Israel Elejalde (Madrid, 1973, con 48 años este enero de 2022) estudió Ciencias políticas, pero ha terminado a las órdenes de los mejores directores de teatro y dirigido alguna obra; además de sacar adelante proyectos como el aplaudido y extinto Teatro Kamikaze con Miguel del Arco. Es alguien para quien la actuación no es un mero acto pasivo de ponerse delante del público, una cámara o un micrófono para seducir a la audiencia, sino que busca el temblor de la palabra más allá del sentir de lo que él habrá de escenificar en aras de despertar el pensamiento y la reflexión.
Una filosofía que ha afinado en sus tres décadas de actuación y casi toda una vida de lector. Ha leído lo mejor de la poesía, interpretado los mejores versos de poetas y logrado el sueño de todo actor: ¡Hamlet!, convertirse en el príncipe de Dinamarca creado por William Shakespeare. Y ser aplaudido por ello.
De todo esto, y más, hablará Elejalde este 17 de enero en nuestro ciclo #LdeLírica. Será en la Sala Callao, de El Corte Inglés, de Madrid, a las 19 horas. También lo podrán seguir por streaming. Como preámbulo a este encuentro, Israel Elejalde ha hecho un acercamiento a su vena poética:
“La poesía es la expresión artística más elevada desde mi puesto de vista. La más difícil también. Admiro profundamente la capacidad de síntesis de los poetas junto con la lucidez para poner palabras, para crear imágenes allí donde los demás solo somos capaces de callar. A parte de mi disfrute como lector es, además, mi herramienta de trabajo. No todo el teatro es necesariamente poético, pero a mí solo me interesa ese, y es el que intento interpretar. El teatro sin poesía me aburre”.
Las líneas temáticas que le interesan al actor madrileño están ahí. Confiesa que le apasiona el teatro poético de personas como Pascal Rambert, Jean-Luc Lagarce, Bernard-Marie Koltès, Sarah Kane, Angélica Lidell, etcétera. Un teatro, asegura Elejalde, “donde se habla para buscar algo que nunca se encuentra, como si el acto de hablar fuera un acto desesperado por encontrar una solución al dolor, a la incertidumbre. Un teatro que esquiva la trama y se centra en el interior del individuo, que retrata más el pensamiento que el habla cotidiana”.
Esa es la vena, la yugular por donde corre el torrente actoral de Elejalde que entre los poetas clásicos se decanta por Shakespeare, “por supuesto”, Baudelaire, Rimbaud, Whitman, Elliot o Rosalía De Castro. Y le apasionan Cernuda y Lorca. Entre los poetas más recientes prefiera a Ángel González, Jaime Gil de Biedma, Miguel D’Ors, José Ángel Valente y Antonio Colinas.
Poetas de la vida de dentro hacia afuera. William Shakespeare ocupa un lugar especial en su vida. “Sus obras son una especie de biblia en mi caso. Las consulto frecuentemente porque la capacidad para poner palabras a las tribulaciones del ser humano es asombrosa. Su vigencia también. Es el autor clásico más moldeable. Hay un misterio en sus textos que le permite adaptarse a los vaivenes culturales de cada época y siempre encontrar una resonancia nueva. La capacidad para retratar el alma humana, sus dudas, sus miedos, sus impulsos es irrepetible. Es como si tuviera metidos los dedos en el enchufe y viera permanentemente lo que hay detrás”.
Y eso en buena medida lo que busca y es Israel Elejalde. Su penúltimo proyecto cinematográfico lo podría llevar a la gala de los Premios Oscar, en Hollywood, junto al equipo de Madres paralelas, de Pedro Almodóvar. En esta película, sobre la memoria histórica de la Guerra Civil española, Elejalde es Arturo, un antropólogo forense que trabaja en la apertura de fosas comunes de la Guerra Civil.
El cine es un medio que él frecuenta cada vez más desde 2014 cuando protagonizó, junto a Bárbara Lennie, Magical Girl, por el que fue nominado a Mejor Actor Revelación en los Premios Goya.
En el teatro destacan sus actuaciones en El castigo sin venganza, La Gran Vía, La paz perpetua, La función por hacer, Veraneantes y Hamlet. Como director de escena estrenó en 2016 La voz humana, de Jean Cocteau. Cine y teatro alternado con mucha televisión donde empezó a hacerse muy conocido por actuaciones como las de Raúl en la serie Cuéntame cómo pasó y como el Capitán Rodrigo en Águila Roja. En todo eso se ha convertido ese muchacho que estudió Ciencias políticas.
Encuentro con Israel Elejalde:
- Lunes 17 de enero a las 19.30 h.
- Asistencia presencial: confirma ambitoculturalcallao@elcorteingles.es
- Emisión en streaming. Síguelo en las RRSS de Ámbito Cultural: Facebook, Instagram y nuestro recién estrenado canal de YouTube.